martes, 21 de abril de 2015

CUMBRE DE LAS AMÉRICAS EN PANAMÁ; UN NUEVO CAPITULO PARA AMÉRICA LATINA

Rudis Yilmar Flores Hernández
Sociólogo, Profesor de la Universidad de
El Salvador, San Miguel, C.A
Hay que recordar que la cumbre de las Américas surge bajo la agenda de la política exterior de Washington para América Latina y el Caribe, la primera organizada por el ex presidente Clinton en 1994 en Miami, la cual tenía como objetivo fundamental la creación de un Área de Libre Comercio para las Américas, que años posteriores fue rechazada por varios países que a la cabeza del fallecido presidente Chávez formularon un proyecto de integración fundamentado en la cooperación, la solidaridad y relaciones de cooperación entre los pueblos, el ALBA significa la esperanza de los pobres latinoamericanos y la posibilidad de construir sociedades más justas comprometidas con el desarrollo social. Como continuidad después tuvieron lugar en Bolivia 1996, Chile 1998, Canadá 2001, México 2004, Argentina 2005, Trinidad y Tobago 2009, Colombia 2012 y Panamá 2015.
La cumbre desarrollada en ciudad de panamá entre los días 10 y 11 de abril de 2015  genero grandes expectativas a nivel mundial, inclusive por los grupos de la derecha reaccionaria latinoamericana alentados por la política guerrerista de los Estados Unidos en los asuntos internos de la mayoría de países de la región; una de las expectativas de dicho evento lo motivaba la discusión entre dos proyectos uno evocado por la convivencia pacífica respetuosa y productiva y otro de ratificar las amenazas y las agresiones del pasado, con una visión militarista atentatoria contra los gobiernos democráticos y en una clara violación a la autodeterminación de los pueblos de nuestra América. 
Por primera vez desde 1994, la Cumbre de las Américas hace el honor de contar con la presencia de Cuba cuya ausencia en las seis citas anteriores  estuvo marcada por presiones de Estados Unidos y sus aliados más cercanos, en contraposición de muchos que reclamaban la comparecencia de la isla como todos los países del continente y hay que ver dicha presencia no como una concesión de Washington sino como producto de una reivindicación de una demanda colectiva de todo el continente que hacen evidente los cambios políticos que comenzó a experimentar América Latina desde la última década del siglo pasado y lo que va del siglo XXI
Bajo este escenario llegaron a Panamá los gobiernos y jefes de Estado  a una cumbre que tenía por lema Prosperidad con Equidad: el Desafío de la Cooperación en las Américas. Este lema no podría tener mayor vigencia sin hacer un recorrido histórico de las realidades latinoamericanas donde los Estados Unidos tienen una asignatura pendiente con la historia de década en década, de siglo tras siglo de años de saqueo y colonización, vendiendo promesas para los latinoamericanos y caribeños como la política del buen vecino, la Alianza para el Progreso, El Área de Libre Comercio Para las Américas  y que nunca se vieron materializados en reducir los niveles de desigualdad y atraso de los países pobres. Hasta el momento, el actual gobierno estadounidense ha mantenido los mismos intereses estratégicos de sus antecesores sobre América Latina y el Caribe, dirigidos a mantener el acceso y control sobre los recursos naturales, el acceso a las fuentes primarias de energía, el dominio de los mercados, la preservación del sistema de colonización ideológico cultural y la contención de los procesos revolucionarios que pretendan desafiar las bases fundamentales de su hegemonía.
El escenario manifestado en la cumbre es sinónimo de un replanteamiento de la política de cooperación, de hermandad entre los pueblos de nuestra América durante las últimas décadas; aun cuando no se debatiera profundamente la temática planteada en la agenda, el posicionamiento de los jefes de Estado giro sobre los problemas más sentidos y de las repercusiones causadas por el bloque económico de más de 50 años impuesto a Cuba, las agresiones que sufre el pueblo venezolano de parte de Washington con la imposición del decreto ejecutivo  que señala a al país bolivariano como una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos, también se abogó por el derecho de Puerto Rico a su auto determinación, el derecho de Argentina sobre las islas Malvinas ocupadas por Inglaterra .
Rafael Correa presidente del Ecuador en su participación recordaba que existe una América Latina y el caribe soberanos y que vivimos hoy en día no un cambio de época sino una época de cambios donde los países latinoamericanos merecen respeto,  Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, relató que “ cuando nosotros escuchamos que Venezuela es una amenaza contra los EE UU inmediatamente corre la historia, qué decimos, yanquis no cambian por un lado un gesto con Cuba, por otro lado un golpe con Venezuela”. “El gesto contra Venezuela es un golpe contra nuestros pueblos, contra la unidad de la América Latina” Raúl Castro, apuntaba “Hemos expresado y le reitero ahora al presidente Barack Obama nuestra disposición al diálogo respetuoso y a la convivencia civilizada entre ambos Estados dentro de nuestras profundas diferencias”, Evo Morales. Estados Unidos nos mira como el colonizador al colonizado, como la potencia al vasallo. Nos divide en buenos y malos, según sus intereses. Somos malos porque defendemos nuestra soberanía política y económica. No queremos más ser vigilados, ser espiados. ? Qué extraña democracia que ínstala bases militares en nuestros países, impere leyes extraterritoriales, impone bloqueo a Cuba por más de 50 años? Presidente Obama su doctrina de seguridad nacional ha fracasado. Hoy hay más peligros en el mundo que hace una década. Su guerra contra la droga ha fracasado. Hoy hay más drogas que antes. Presidente Obama deje de hacer la guerra. Nicolás Maduro Exigió a su homólogo estadounidense, Barack Obama, derogar el decreto ejecutivo que señala a Venezuela como una amenaza contra la nación norteña y calificó esa medida como indignante y peligrosa. Dijo que constituye la más grave agresión proferida contra su país en 200 años.
La Presidenta  Argentina Cristina Fernández. Decía  que no le resulta fácil hablar después de la intervención del presidente y amigo Comandante Raúl Castro. Pide que además de equidad e inclusión, en estas cumbres se incluya como tema la Sinceridad. Sostiene que el combate a la droga sólo puede ser efectivo si se involucran en su territorio los países grandes consumidores y se aborda con transparencia el tema del lavado del dinero de las drogas. Qué se persiga con igual rigor con que se persigue el dinero del terrorismo. ¿Dónde es qué se lava ese dinero? Los grandes países se quedan con el dinero de las drogas; nosotros con los muertos y las armas.
Paralelamente se desarrollaba la cumbre de los pueblos donde participaron organizaciones sindicales, campesinas,, indígenas, estudiantiles, de derechos humanos, ecologistas, feministas, para discernir sobre los grandes y graves problemas que afectas a nuestros pueblos, está Cumbre de los Pueblos criticó en su declaración final el militarismo intervencionista de EE.UU., rechazó que se considere a Venezuela como una “amenaza”, respaldó la reivindicación de Argentina sobre las Malvinas y reclamó la independencia de Puerto Rico. Expresaron su firme respaldo a la proclamación de América Latina y el Caribe como zona de paz y libre de colonialismo”, rechazan “el acoso militar, agresiones y amenazas de toda índole que despliega Estados Unidos y sus aliados estratégicos” contra la región, ya que “Ningún país tiene derecho a juzgar la conducta de otro ni muchísimo menos a imponerle sanciones o castigos por cuenta propia”.
Bajo todos estos argumentos es necesario precisar que el espacio creado desde 1994 por los Estados Unidos para mantener su política de injerencia sobre América Latina, con la cumbre de panamá queda demostrado que es ya un espacio que no puede dirigir, el retiro del presidente Obama de la plenaria de jefes de estado es una actitud cuestionable al no escuchar buena parte de los discursos de otros mandatarios. Esta imagen también nos lleva hacer otra lectura y como lo expresaba el presidente Correa desde el rio bravo hacia el sur pensamos diferente y esto hace posible el fortalecimiento de los organismos como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), UNASUR, el ALBA, PETROCARIBE.
Al igual que en Cartagena en el 2012 la ausencia de una resolución final de la cumbre dan muestra de la divergencia económica y política de los pueblos de la región, los países del norte de América esperaban encontrar  apoyo  para posicionarse sobre el decreto contra Venezuela 
Rumbo a la próxima cumbre a desarrollarse en el 2018 en Perú, debemos pensar que aun cuando los Estados Unidos debilitan su política de hostigamiento contra Cuba, el escenario seguirá siendo complejo, probablemente Obama no derogue el decreto ejecutivo contra Venezuela alentado por las elites de poder dominante, seguirán apostando a financiar a grupos terroristas de las derechas recalcitrantes de Latinoamérica para desestabilizar los procesos democráticos, seguirá apostándole a la presencia militar como la estrategia diseñada para los países del triángulo del norte, El Salvador, Honduras y Guatemala con la Alianza para la Prosperidad del Triángulo del Norte  disfrazada con el fin de atacar problemas como el narcotráfico, pandillas, pobreza y  migración. En contraposición hasta qué punto los organismos como la CELAC marcaran el pulso  de las discusiones regionales y como se moverá el escenario político con gobiernos posneoliberales.



No hay comentarios:

Publicar un comentario