martes, 3 de noviembre de 2015

LAS MOVILIZACIONES SOCIALES  EN GUATEMALA
Rudis Yilmar Flores Hernández
Profesor  Investigador de la Universidad de El Salvador
ryflores.ues@gmail.com

Muchos medios de comunicación en los últimos días a partir de las movilizaciones en Guatemala comenzaron a conceptualizar, y a comparar con la primavera árabe y con los movimientos indignados en Europa y Norte América sin hacer los análisis correspondientes de las causas que provocan el malestar social en amplios sectores de la sociedad.
Es necesario puntualizar algunos elementos que permitan diferenciar realidades que se contraponen y que difícilmente tendrán resultados que abonen a los procesos de democratización  y a la construcción de proyectos políticos viables que resuelvan la brecha entre ricos y pobres establecida con la puesta en marcha del neoliberalismo y las políticas emanadas de EE.UU a través de las recetas del Consenso de Washington
En los últimos años asistimos a una profunda crisis económica de muchos países de Europa que dada su condición periférica fueron sometidos a políticas de endeudamiento por los organismos financieros internacionales provocando la incapacidad del Estado en atender los problemas sociales, en proporcionar los servicios públicos, causando empobrecimiento en amplios sectores de la clase media y privando a los jóvenes de la educación y de las posibilidades de tener acceso a un empleo digno. Grecia, España y Portugal son parte de esa tragedia que se vio expresada en multitudinarias manifestaciones de los sectores más golpeados por la aplicación de medidas neoliberales como los procesos de privatización de las instituciones públicas.
Veamos algunos casos de amplias movilizaciones sociales, en el caso de griegos, producto de la crisis, las plazas y las calles se convirtieron en campos de batalla para los movimientos sociales y surgió Siryza como frente en el año 2004, a partir de la coalición de varios grupos de izquierda, ecologistas de izquierda, políticos independientes, partidarios del socialismo democrático y  convertido en partido político en el 2012, para responder a la crisis y posicionándose como la principal oposición entre el 2012 y el 2014. En las elecciones europeas del 2014 fue el partido más votado de todo el país, y en las elecciones parlamentarias del 2015 estuvo a dos escaños de tener la mayoría absoluta.
El primer ministro Alexis Tsipras, tras recibir el visto bueno del parlamento convoco a consulta popular  tras las fracasadas negociaciones de la deuda  con los organismos financieros internacionales como el Fondo Monetario Internacional, El Banco Central Europeo y la Comisión Europea. El 5 de julio los griegos votaron por el  no a los recortes en pensiones y servicios sociales. Votaron  a favor de lograr un acuerdo con Europa que pase por reestructurar la deuda y pasar de los ajustes a los incentivos para la economía. El 61,5% del no reclama una enmienda al discurso hegemónico en el continente y, con ello, concede oxígeno a un discurso alternativo sobre el modelo de construcción europea, del cual Tsipras es el único exponente entre los socios comunitarios.
En España el nuevo partido PODEMOS,  constituye una mayor innovación política en Europa  y sus referentes los podemos encontrar en el Foro Social Mundial, donde se retoman los esfuerzos de los gobiernos progresistas de América Latina  y la dinámica de los movimientos sociales que llevaron a dichos gobiernos al poder mediante las experiencias de democracia participativa, sobre todo a escala local, en muchas ciudades latinoamericanas y a partir de la primavera árabe. Cuatro meses después de su formación participo en las elecciones europeas en el 2014, obteniendo cinco escaños, siendo la sorpresa de los comicios, y en las elecciones del 2015 lograron romper el bipartidismo entre el Partido Popular y el Partido Socialista Español que en los últimos 40 años después de la dictadura se alternaban el poder.
Podemos es el resultado de un aprendizaje, un nuevo tipo de partido, un partido en movimiento que sabe canalizar las demandas de los grandes sectores desposeídos, de las personas hartas de la política del PP y del PSOE, así  como de una cantidad de ciudadanos que no  se movilizan políticamente, ni salen a las calles a manifestarse, pero simpatizan con el activismo político.
Bajo esta realidad surgen interrogantes ¿será posible una ola de podemos que se propague por otros países? Las condiciones varían mucho de un país a otro. Podemos es la expresión de acercar la política a los ciudadanos y demostrar que esta aproximación no se reduce a la participación político electoral cada cuatro años y de políticos que aprenden a vivir de la política. Los proyectos alternativos surgidos en países de América del sur tienen a su base largos procesos de luchas revolucionarias y la instauración por décadas de dictaduras militares y se distinguen por el acercamiento de la política a las clases más desposeídas. Podemos constituye un referente de como el voto de indignación se puede transformar en un voto estratégico mediante un proceso de maduración que les permite ganar espacios y restarle poder a los grupos hegemónicos.
Podríamos citar más ejemplos como el caso Yo Soy 132 en México, los Indignados de Tel Aviv que no lograron revertir la política neoliberal y los Indignados de Wall Street; a diferencia de Podemos, estos movimientos no lograron construir frentes amplios y en consecuencia   se debilitan ya que no es lo mismo la expresión ciudadana cuando sucede en el marco de la creencia de una renovación gradual de la sociedad basada en la tolerancia y la no violencia al margen de los procesos de institucionalización.
A quienes comparen estos movimientos con la realidad que viven los países centroamericanos deben establecer los aspectos  que causan  el malestar social. En el segundo semestre del 2015 asistimos a una serie de movilizaciones que convulsionan la política interna de países como Honduras,  donde casos de corrupción empañan la gestión del gobierno de derecha. En Guatemala los mismos grupos de poder económico terminan purgándose y la crisis que hoy enfrenta este país golpeado por la violencia, el narco tráfico y como detonante la corrupción del gobierno de Otto Pérez y su Vicepresidenta Roxana Baldetti, quienes enfrentan juicios acusados de pertenecer a una red de corrupción conocida como la Línea, una estructura de defraudación que se manejaba a nivel de las aduanas donde se beneficiaban monetariamente no terminará de ser un espacio de transición de un grupo de poder a otro si perspectiva que las demandas de la ciudadanía se vean cristalizadas en un proyecto que resuelva los viejos y endémicos problemas del sistema capitalista.
Las manifestaciones de distintos sectores de la sociedad y las presiones de Washington obligaron  a renunciar al presidente Pérez después que el Congreso le retirara la inmunidad para poder ser juzgado como un ciudadano ordinario y fuera emitida una orden de captura en su contra.
Estos eventos que convocaron a diversos sectores sociales entre ellos campesinos, indígenas, estudiantes y trabajadores que constantemente marcharon en Guatemala pidiendo la renuncia del presidente no logran dimensionar el manejo político que hacen los grupos de poder económico y el manejo mediático de los medios  de comunicación, las demandas quedarán en un segundo plano, la corrupción seguirá su curso con gobiernos de derecha, la renovación de la clase política seguirá siendo una deuda pendiente mientras los movimientos sociales sigan asumiendo una lucha coyuntural y no logren construir un proyecto político que les permita ganar cuotas de poder político que abonen en las transformaciones sociales.
Las pasadas elecciones celebradas el 6 de septiembre resultan ser un salto al vacío, los guatemaltecos votaron en la primera vuelta electoral por Jimmy Morales sin saber sus vínculos con militares, un comediante que poco o nada podría contribuir a sanear el sistema político de la corrupción, posicionándolo en el primer lugar con el 23% de los votos  por sobre Manuel Baldizon del partido LIDER y a Sandra Torres del partido UNE.
Más allá de analizar los resultados electorales, no se vislumbra en Guatemala la consolidación de un proyecto político capaz de aglutinar a la mayor parte de los movimientos sociales.  La izquierda después de finalizado el conflicto armado no logro conducir los procesos de cambios al punto de desaparecer como partido político surgido de los Acuerdos de Paz, no hay una forma de canalizar la lucha social hacia un movimiento con capacidad de encarnar institucionalidad y de convertirse en opción para el pueblo guatemalteco.


viernes, 22 de mayo de 2015

El Salvador: San Romero de América, el Salvadoreño más Universal

Rudis Yilmar Flores Hernández
Sociólogo, Profesor de la Universidad de
El Salvador, San Miguel, C.A

El Salvador a igual que muchos países de américa  Latina  compartían características similares en la década de los 80s, todos vivían la represión de las dictaduras militares, los espacios de participación política se cerraron producto de los golpes de Estado generados por los militares quienes se traspasaban el poder de mano en mano. Es importante apuntalar que la sociedad Salvadoreña vivió en la década de los años 80 del siglo pasado, el inicio de una guerra civil marcada  por la falta de espacios democráticos que permitieran la participación directa de la población en la toma de decisiones, esta lucha dura doce años y culmina con los Acuerdos de Paz en 1992.
La historia de El Salvador desde   mediados del siglo XX, se manifiesta por un largo periodo de profundos conflictos políticos, económicos y sociales, que lo llevaron a la confrontación armada; por la falta de democracia y de espacios políticos que reflejaban la ausencia  de participación política de la sociedad civil.  Las dictaduras militares fueron durante muchos años la forma de gobierno impuesta bajo la represión. La lucha de los movimientos sociales obligó a los militares a generar cambios en las estructuras políticas, pasando a conformar una dictadura militar orgánica, vinculada a los partidos de derecha.
Bajo este panorama los escuadrones de la muerte comenzaron ejecutar el genocidio del pueblo salvadoreño, asesinando a campesinos, estudiantes, dirigentes sindicales, maestros, dirigentes políticos de izquierda  y sacerdotes como el padre Rutilio Grande que junto con dos acompañantes fueron asesinados un 12 de marzo de 1977 cuando se conducían al Paisnal en el departamento de Chalatenango.  El trabajo del sacerdote Rutilio Grande, se caracterizó por defender a los más desposeídos y denunciar los atropellos cometidos por las autoridades, desde su parroquia de Aguilares, en el departamento de San Salvador;  El padre Grande, creó las Comunidades Eclesiales de Base (CEB), originando reacción adversa de parte de los terratenientes de la zona, que lo calificaron como un agitador comunista. El sacerdote Rutilio Grande, es considerado como el primer mártir de la Iglesia salvadoreña.
Oscar Arnulfo Romero un sacerdote conservador que en ciertas ocasiones fue criticado por sectores progresistas, lo consideraban como un arzobispo a fin a la oligarquía desde sus inicios en la pastoral desde 1944, por la forma de como desde un mensaje religioso entendía la realidad política y económica del país. El asesinato de su mejor amigo Rutilio Grande marca un antes y un después en la vida de Monseñor Romero;  al enterarse de los asesinatos, fue al templo en donde reposaban los tres cuerpos y celebró la misa. En la mañana del día siguiente, después de reunirse con los sacerdotes y consejeros, Romero anunció que no asistiría a ninguna ocasión o actividad gubernamental ni a ninguna junta con el presidente, siendo ambas actividades tradicionales del puesto, hasta que la muerte del sacerdote  se investigara.
Desde este momento se convirtió en un referente  a nivel nacional e internacional de lo que ocurría en El Salvador, denunciaba sistemáticamente al gobierno militar y la violación a los derechos humanos ejercida por el Estado y los grupos paramilitares, convirtiéndose en una de las voces más respetadas dentro de la iglesia católica  latinoamericana
  "Yo quisiera hacer un llamamiento, de manera especial, a los hombres del ejército. Y en concreto, a las bases de la Guardia Nacional, de la policía, de los cuarteles... Hermanos, son de nuestro mismo pueblo. Matan a sus mismos hermanos campesinos. Y ante una orden de matar que dé un hombre, debe prevalecer la ley de Dios que dice: "No matar". Ningún soldado está obligado a obedecer una orden contra la Ley de Dios. Una ley inmoral, nadie tiene que cumplirla. Ya es tiempo de que recuperen su conciencia, y que obedezcan antes a su conciencia que a la orden del pecado. La Iglesia, defensora de los derechos de Dios, de la Ley de Dios, de la dignidad humana, de la persona, no puede quedarse callada ante tanta abominación. En nombre de Dios, pues, y en nombre de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno en nombre de Dios: Cese la represión". (Homilía dominical, 23 de marzo de 1980)
El 24 de marzo de 1980 el defensor de los pobres, el que se convirtió en la vos de los sin vos,  mientras oficiaba una misa en la iglesia  Divina Providencia en la capital murió atravesado por una bala que destrozo su corazón. Desde sus homilías monseñor trato de inculcar a su pueblo la fe en Dios. “Dios es el Dios de Jesucristo. El dios de los cristianos no tiene que ser otro, es el Dios de Jesucristo, el del que se identificó con los pobres, el del que dio su vida por los demás, el Dios que mandó a su Hijo Jesucristo a tomar una preferencia sin ambigüedades por los pobres. Sin despreciar a los otros, los llamó a todos al campo de los pobres para poderse hacer iguales a él. Nadie está condenado en vida; sólo aquel que rechaza el llamamiento del Cristo pobre y humilde y prefiera más las idolatrías de su riqueza y de su poder” (Homilía 27-05-1979).
El vaticano y en especial el papa Francisco tras su llegada a Roma y después de 35 años del martirio de Romero  decidió convertirlo en beato por considerar que es un mártir de la iglesia universal y que sus victimarios actuaron “por odio a la fe”. Sin embargo estando tan claras las virtudes de monseñor surgen preguntas del porque la iglesia católica se negaba a beatificarlo, Paglia, presidente del Consejo Pontificio de la Familia y postulador de la causa de beatificación de Monseñor Romero,  acusó a la derecha salvadoreña y de la Iglesia de frenar el proceso del asesinato del prelado, estos enviaron una cantidad grande de cartas en las cuales pedían al vaticano no beatificar al mártir, responsabilidad que no quisieron asumir los dos antecesores del papa Francisco.
Hay que destacar que Romero desde su martirio se  convirtió en santo para los más pobres, durante los 35 años de su muerte siempre las comunidades, los estudiantes, los campesinos, las mujeres, los niños, los ancianos le recuerdan como el cura que dio su vida por un futuro mejor, por detener los atroces  crímenes perpetrados por los escuadrones de la muertes creados por el actor intelectual de su muerte el mayor Roberto dAbuisson.
El acto de beatificación está marcado por esa distancia entre la iglesia tradicional   y la iglesia comprometida, el acto no dejara de ser la parte  formal, donde estará la alta jerarquía de la Iglesia Católica y que tanto en el pasado conspiraron para asesinar a monseñor, que trataron de detener el proceso en el vaticano y que hoy en día le dan la espalda a los problemas que viven las grandes mayorías.

 Es importante señalar que se han desarrollado actividades como vigilias tanto de la parte oficial de la iglesia como de las Comunidades Eclesiales de Base surgidas durante el conflicto armado, los grandes medios de comunicación de derecha  venden la idea que Romero es mártir por amor, los más pobres lo recuerdan como el máximo defensor de sus intereses y que fue asesinado por odio a la fe.

martes, 21 de abril de 2015

CUMBRE DE LAS AMÉRICAS EN PANAMÁ; UN NUEVO CAPITULO PARA AMÉRICA LATINA

Rudis Yilmar Flores Hernández
Sociólogo, Profesor de la Universidad de
El Salvador, San Miguel, C.A
Hay que recordar que la cumbre de las Américas surge bajo la agenda de la política exterior de Washington para América Latina y el Caribe, la primera organizada por el ex presidente Clinton en 1994 en Miami, la cual tenía como objetivo fundamental la creación de un Área de Libre Comercio para las Américas, que años posteriores fue rechazada por varios países que a la cabeza del fallecido presidente Chávez formularon un proyecto de integración fundamentado en la cooperación, la solidaridad y relaciones de cooperación entre los pueblos, el ALBA significa la esperanza de los pobres latinoamericanos y la posibilidad de construir sociedades más justas comprometidas con el desarrollo social. Como continuidad después tuvieron lugar en Bolivia 1996, Chile 1998, Canadá 2001, México 2004, Argentina 2005, Trinidad y Tobago 2009, Colombia 2012 y Panamá 2015.
La cumbre desarrollada en ciudad de panamá entre los días 10 y 11 de abril de 2015  genero grandes expectativas a nivel mundial, inclusive por los grupos de la derecha reaccionaria latinoamericana alentados por la política guerrerista de los Estados Unidos en los asuntos internos de la mayoría de países de la región; una de las expectativas de dicho evento lo motivaba la discusión entre dos proyectos uno evocado por la convivencia pacífica respetuosa y productiva y otro de ratificar las amenazas y las agresiones del pasado, con una visión militarista atentatoria contra los gobiernos democráticos y en una clara violación a la autodeterminación de los pueblos de nuestra América. 
Por primera vez desde 1994, la Cumbre de las Américas hace el honor de contar con la presencia de Cuba cuya ausencia en las seis citas anteriores  estuvo marcada por presiones de Estados Unidos y sus aliados más cercanos, en contraposición de muchos que reclamaban la comparecencia de la isla como todos los países del continente y hay que ver dicha presencia no como una concesión de Washington sino como producto de una reivindicación de una demanda colectiva de todo el continente que hacen evidente los cambios políticos que comenzó a experimentar América Latina desde la última década del siglo pasado y lo que va del siglo XXI
Bajo este escenario llegaron a Panamá los gobiernos y jefes de Estado  a una cumbre que tenía por lema Prosperidad con Equidad: el Desafío de la Cooperación en las Américas. Este lema no podría tener mayor vigencia sin hacer un recorrido histórico de las realidades latinoamericanas donde los Estados Unidos tienen una asignatura pendiente con la historia de década en década, de siglo tras siglo de años de saqueo y colonización, vendiendo promesas para los latinoamericanos y caribeños como la política del buen vecino, la Alianza para el Progreso, El Área de Libre Comercio Para las Américas  y que nunca se vieron materializados en reducir los niveles de desigualdad y atraso de los países pobres. Hasta el momento, el actual gobierno estadounidense ha mantenido los mismos intereses estratégicos de sus antecesores sobre América Latina y el Caribe, dirigidos a mantener el acceso y control sobre los recursos naturales, el acceso a las fuentes primarias de energía, el dominio de los mercados, la preservación del sistema de colonización ideológico cultural y la contención de los procesos revolucionarios que pretendan desafiar las bases fundamentales de su hegemonía.
El escenario manifestado en la cumbre es sinónimo de un replanteamiento de la política de cooperación, de hermandad entre los pueblos de nuestra América durante las últimas décadas; aun cuando no se debatiera profundamente la temática planteada en la agenda, el posicionamiento de los jefes de Estado giro sobre los problemas más sentidos y de las repercusiones causadas por el bloque económico de más de 50 años impuesto a Cuba, las agresiones que sufre el pueblo venezolano de parte de Washington con la imposición del decreto ejecutivo  que señala a al país bolivariano como una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos, también se abogó por el derecho de Puerto Rico a su auto determinación, el derecho de Argentina sobre las islas Malvinas ocupadas por Inglaterra .
Rafael Correa presidente del Ecuador en su participación recordaba que existe una América Latina y el caribe soberanos y que vivimos hoy en día no un cambio de época sino una época de cambios donde los países latinoamericanos merecen respeto,  Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, relató que “ cuando nosotros escuchamos que Venezuela es una amenaza contra los EE UU inmediatamente corre la historia, qué decimos, yanquis no cambian por un lado un gesto con Cuba, por otro lado un golpe con Venezuela”. “El gesto contra Venezuela es un golpe contra nuestros pueblos, contra la unidad de la América Latina” Raúl Castro, apuntaba “Hemos expresado y le reitero ahora al presidente Barack Obama nuestra disposición al diálogo respetuoso y a la convivencia civilizada entre ambos Estados dentro de nuestras profundas diferencias”, Evo Morales. Estados Unidos nos mira como el colonizador al colonizado, como la potencia al vasallo. Nos divide en buenos y malos, según sus intereses. Somos malos porque defendemos nuestra soberanía política y económica. No queremos más ser vigilados, ser espiados. ? Qué extraña democracia que ínstala bases militares en nuestros países, impere leyes extraterritoriales, impone bloqueo a Cuba por más de 50 años? Presidente Obama su doctrina de seguridad nacional ha fracasado. Hoy hay más peligros en el mundo que hace una década. Su guerra contra la droga ha fracasado. Hoy hay más drogas que antes. Presidente Obama deje de hacer la guerra. Nicolás Maduro Exigió a su homólogo estadounidense, Barack Obama, derogar el decreto ejecutivo que señala a Venezuela como una amenaza contra la nación norteña y calificó esa medida como indignante y peligrosa. Dijo que constituye la más grave agresión proferida contra su país en 200 años.
La Presidenta  Argentina Cristina Fernández. Decía  que no le resulta fácil hablar después de la intervención del presidente y amigo Comandante Raúl Castro. Pide que además de equidad e inclusión, en estas cumbres se incluya como tema la Sinceridad. Sostiene que el combate a la droga sólo puede ser efectivo si se involucran en su territorio los países grandes consumidores y se aborda con transparencia el tema del lavado del dinero de las drogas. Qué se persiga con igual rigor con que se persigue el dinero del terrorismo. ¿Dónde es qué se lava ese dinero? Los grandes países se quedan con el dinero de las drogas; nosotros con los muertos y las armas.
Paralelamente se desarrollaba la cumbre de los pueblos donde participaron organizaciones sindicales, campesinas,, indígenas, estudiantiles, de derechos humanos, ecologistas, feministas, para discernir sobre los grandes y graves problemas que afectas a nuestros pueblos, está Cumbre de los Pueblos criticó en su declaración final el militarismo intervencionista de EE.UU., rechazó que se considere a Venezuela como una “amenaza”, respaldó la reivindicación de Argentina sobre las Malvinas y reclamó la independencia de Puerto Rico. Expresaron su firme respaldo a la proclamación de América Latina y el Caribe como zona de paz y libre de colonialismo”, rechazan “el acoso militar, agresiones y amenazas de toda índole que despliega Estados Unidos y sus aliados estratégicos” contra la región, ya que “Ningún país tiene derecho a juzgar la conducta de otro ni muchísimo menos a imponerle sanciones o castigos por cuenta propia”.
Bajo todos estos argumentos es necesario precisar que el espacio creado desde 1994 por los Estados Unidos para mantener su política de injerencia sobre América Latina, con la cumbre de panamá queda demostrado que es ya un espacio que no puede dirigir, el retiro del presidente Obama de la plenaria de jefes de estado es una actitud cuestionable al no escuchar buena parte de los discursos de otros mandatarios. Esta imagen también nos lleva hacer otra lectura y como lo expresaba el presidente Correa desde el rio bravo hacia el sur pensamos diferente y esto hace posible el fortalecimiento de los organismos como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), UNASUR, el ALBA, PETROCARIBE.
Al igual que en Cartagena en el 2012 la ausencia de una resolución final de la cumbre dan muestra de la divergencia económica y política de los pueblos de la región, los países del norte de América esperaban encontrar  apoyo  para posicionarse sobre el decreto contra Venezuela 
Rumbo a la próxima cumbre a desarrollarse en el 2018 en Perú, debemos pensar que aun cuando los Estados Unidos debilitan su política de hostigamiento contra Cuba, el escenario seguirá siendo complejo, probablemente Obama no derogue el decreto ejecutivo contra Venezuela alentado por las elites de poder dominante, seguirán apostando a financiar a grupos terroristas de las derechas recalcitrantes de Latinoamérica para desestabilizar los procesos democráticos, seguirá apostándole a la presencia militar como la estrategia diseñada para los países del triángulo del norte, El Salvador, Honduras y Guatemala con la Alianza para la Prosperidad del Triángulo del Norte  disfrazada con el fin de atacar problemas como el narcotráfico, pandillas, pobreza y  migración. En contraposición hasta qué punto los organismos como la CELAC marcaran el pulso  de las discusiones regionales y como se moverá el escenario político con gobiernos posneoliberales.



El Salvador: Lecciones para la Izquierda Salvadoreña, elecciones 2015


Rudis Yilmar Flores Hernández
Sociólogo, Profesor de la Universidad de
El Salvador, San Miguel, C.A
Correo: ryflores.ues@gmail.com

El primero de marzo del 2015 se celebraron comicios electorales para elegir un nuevo congreso salvadoreño conformado por 84 diputados y elecciones para elegir a doscientos sesenta y dos alcaldes de todo el país y 20 diputados al Parlamento Centroamericano. Las dos fuerzas principales comenzaron su carrera  en la lucha por obtener mayoría en el congreso; el partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) quien por ahora ocupa el ejecutivo  y el partido de derecha Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) quien representa los intereses del gran capital y que al calor de la envestida de la derecha venezolana contra el presidente Maduro  reproducen sus formas de terrorismo deslegitimando las instituciones del Estado que desde el año 2009 con el ascenso de la izquierda al poder comenzaron a adoptar una nueva forma de gobernar con una visión preferencial por los pobres. 
Hay que destacar que desde la creación del Tribunal Supremo Electoral con la firma de los acuerdos de Paz en 1992 los procesos electorales experimentan cambios cuantitativos y cualitativos y eso obliga a los partidos políticos a democratizar los procesos internos generando mayores niveles de participación de la bases y de manera muy puntual de la sociedad civil que exige mayores niveles de transparencia y  nuevos espacios como las candidaturas independientes no vinculadas a los partidos políticos.
Las elecciones del 2015 no escaparon a esos cambios, los partidos se enfrentaron a tres modalidades, por una parte los consejos plurales; tradicionalmente los partidos políticos en el país sin alcanzar el 50 % de votos válidos en una elección copaban todos los puestos de los consejos municipales, con la reforma a partir del primero de mayo de 2015, donde toman posesión los nuevos consejos, estarán integrados por al menos dos partidos políticos según la cantidad de votos obtenidos por cada uno de ellos, estos consejos plurales serán con gobernabilidad, lo que implica que el partido ganador siempre tendrá mayoría pero con la modalidad que los otros podrán fiscalizar  la aprobación y fiscalización del presupuesto municipal. Otra modalidad fue el voto cruzado, tradicionalmente solo han sido validos los votos acreditados a un solo partido político, a partir del uno de marzo la población según el número de diputados a elegir por departamento, por ejemplo en San Miguel son seis, y participan ocho partidos políticos, el ciudadano ejerció el sufragio cruzando el voto entre los distintos candidatos, lo cual implico el fraccionamiento ya que si voto por seis candidatos de partidos distintos el voto se dividió entre todos.
Es importante señalar que la implementación del voto cruzado tanto para diputados a la Asamblea Legislativa y Parlamento Centroamericano (PARLACEN) se da a partir de una resolución de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, pocos meses antes de desarrollar los comicios electorales lo cual complico el  escrutinio tanto en las Juntas Receptoras de votos (JRV) y el escrutinio final que desarrollan las Juntas Electorales Departamentales (JED); el retraso del organismo colegiado en dar los resultados definitivos está marcado por todas las dificultades que enfrentaron los miembros de las JRV por el poco tiempo en procesos de capacitación sobre el llenado de actas y sobre todo por el entorpecimiento por parte de la derecha cuando los resultados son adversos a sus intereses  y deslegitiman el papel del Tribunal Supremo Electoral.
La mayoría de reformas están dadas por recursos de inconstitucionalidad interpuestos a la Sala de lo Constitucional, presentados por movimientos de la sociedad civil, o con fachada civil, algunos representan intereses privados y que demandan mayores niveles de participación y la oportunidad de elegir.  A última hora   la Sala de  lo Constitucional declaró inconstitucional un artículo del Código Electoral que establece que el voto por bandera se distribuye en la forma de como los partidos políticos presentan los candidatos esto implicaba que solo los primeros de la lista tenían oportunidad de ser diputados, la resolución establece que los votos por bandera debe repartirse de forma igualitaria entre todos dando igual oportunidad tanto al primero como al último.  
Esta forma de distribuir los escaños en el parlamento pasó factura a la derecha ya que muchos de sus viejos cuadros que se ubicaban en puestos ganadores quedaron fuera de la contienda, siendo elegidos diputados muy poco reconocidos en política. Por su parte el Frente Farabundo Martí llamo a la población a votar por bandera  que también está considerada en las formas de votar.
Después de cerrado el proceso electoral es importante reflexionar sobre quien es el ganador o el perdedor si el FMLN o el pueblo salvadoreño o si la derecha comienza a recuperar cuotas de poder pérdidas desde 1994 cuando la izquierda comenzó a participar  como partido político en los procesos electorales; El Frente obtuvo 31 de 84 diputados en el congreso, uno menos que en la legislatura 2012-2015, 8 diputados al Parlamento Centroamericano, 85 Alcaldías, tres de ellas en coalición, donde destacan dos de las ciudades más importantes del país, la Capital San Salvador  y la segunda en importancia San Miguel que se gana por primera vez en la historia, la derechista ARENA  8 diputados al PARLACEN, 129 Alcaldías, diez de ellas en coalición con partidos pequeños de derecha y 35 diputados a la Asamblea, tres de ellos en coalición, lo cual le da  mayores posibilidades de negociar cuotas de poder con otros partidos de derecha como el Partido de Concertación Nacional  que cuenta con 6, dos de ellos en coalición, Partido Demócrata Cristiano 1, reuniendo 43 votos, mayoría simple, suficiente para aprobar decretos de ley nocivos a la población y favorables a los grupos de poder económico, el partido de derecha moderada GANA obtuvo 11 diputados con quien el frente tuvo a su favor la aritmética en la legislatura que culmina el 31 de junio de 2015.
Si revisamos los avances generados por el ejecutivo en el país desde que ascendió al poder en el 2009, nos obliga a pensar  porque el frente no obtiene más congresistas que la derecha, fuera de toda la campaña de miedo y de terror infundido retomando el papel terrorista de los grupos de poder económico venezolanos.
Hagamos un poco de memoria, la inversión en los programas sociales es uno de los puntos más destacados en la gestión del gobierno del FMLN. Uno de estos programas son  los paquetes escolares, que consiste en la entrega de uniformes, calzado, y útiles escolares a más de un millón trecientos mil estudiantes  que asisten a más de cinco mil escuelas.
Otros programas como el vaso de leche, alimentación y salud escolar, entregado a  niños y niñas generó el aumento en la matrícula escolar, ya que para las familias más pobres  no es un obstáculo para enviar sus hijos a la escuela. Otro de los logros es la alfabetización de más de 130 mil personas, declarando el Ministerio de Educación 14 municipios libres de analfabetismo.
Ciudad Mujer es un programa reconocido a nivel mundial, inclusive por la ONU impulsado por el Gobierno del Ex - Presidente de El Salvador, Mauricio Funes, a través de la Secretaría de Inclusión Social, con el que se garantizan los derechos fundamentales de las mujeres salvadoreñas, a través de servicios especializados como: salud sexual y reproductiva, la atención integral a la violencia de género, el empoderamiento económico y la promoción de sus derechos. Además, se cuenta con un área de atención infantil para que las hijas/hijos sean atendidas mientras sus madres reciben los diferentes servicios.
Para los municipios más pobres del país, se implementó el programa de la Pensión Básica Universal con la intención de mejorar las condiciones de vida de las personas adultas mayores. El presidente Funes en su periodo argumentaba que era una reivindicación de un derecho humano que ningún gobernante asumió en el pasado  y que nadie debe quitarles en el futuro.
Algo es claro si bien estos programas no resuelven en absoluto el problema de la pobreza, si han contribuido a aliviar las condiciones más sentidas de la población salvadoreña. Y reconocen que el modelo neoliberal está agotado, que hizo más ricos a los ricos y más pobres a los pobres, que  ellos pagaron un costo muy alto de su implementación, que se vendieron los bienes públicos que podían generar ingresos  a las arcas del Estado, tenemos una deuda externa de más de 11 mil millones de dólares, más de dos millones de salvadoreños que viven en Estados Unidos y que  le inyectan a nuestra economía más de 4 mil millones de dólares anuales.
En materia económica y de inversión  experimento el  país un giro estratégico después del triunfo del FMLN en las elecciones presidenciales del 2009, se abrieron nuevos horizontes en materia de  relaciones comerciales que incomodan constantemente los intereses de la derecha empresarial. El surgimiento del ALBA como contraposición al fallado esfuerzo de los gringos de crear un  Área de Libre Comercio para las Américas, genera expectativas para la mayoría de los países latinoamericanos en una nueva era de relaciones comerciales, de respeto mutuo entre los pueblos y en materia de cooperación  económica y social.
A pesar que El Salvador no es miembro permanente de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América  (ALBA)  y por la importancia de las relaciones sostenidas  entre el recordado presidente Chávez  y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN),  dieron  como resultado programas como la Misión  Milagro que ha contribuido a que más de  seis mil salvadoreños  fueran operados de problemas de la vista de manera gratuita en la República Bolivariana, el recibimiento de ayuda en caso de desastres naturales y el convenio de exportación de  crudo a través de ALBA PETROLEOS con precios preferenciales. ALBA Petróleos de El Salvador  es la síntesis del nuevo concepto de cooperación entre los pueblos, enmarcada en El ALBA y PETROCARIBE. En él concurren la visión de futuro del Estado venezolano en Concreción de los sueños de Bolívar y Martí por la integración y la Unidad de América Latina.
A partir de  febrero de 2012 se impulsa Alba Alimentos de El Salvador que es un proyecto  con el objetivo de beneficiar a los agricultores, a través de financiamiento, insumos y comercialización. La empresa tiene el objetivo de reactivar 100 mil manzanas de tierra a escala nacional. Alba Alimentos se convierte en  ayuda a los campesinos salvadoreños, y con una  proyección de  reactivar la agricultura, la cual fue lacerada y esterilizada por el partido ARENA. El programa de ALBA Alimentos consiste en la entrega de semilla, agroquímicos, entre los que podemos mencionar  el sulfato un agroquímico tan vital para el cultivo del maíz y del frijol. Este programa es canalizado a través del FMLN con la ayuda del Gobierno Bolivariano de Venezuela. Con este proyecto se está logrando que  el campesino pueda sembrar la tierra y elevar los niveles de productividad.
La cooperación de países como Venezuela permite el desarrollo e intercambio entre  los pueblos de nuestra América, y la alternativa de consolidar un modelo alternativo de desarrollo que tenga como base al ser humano y la preservación de los recursos naturales para sustentabilidad y la sostenibilidad de las futuras generaciones.
Desde el 2013, la Asociación de la Empresa Privada y su instrumento político ARENA  desatan una campaña contra ALBA negocios, acusándola de competencia desleal por los precios preferenciales que tiene por ejemplo los frijoles y el maíz para los pobres, contradiciéndose con las reglas del libre mercado que ellos mismos impusieron con el modelo neoliberal. Ahora no se trata de si  le gusta o no a la empresa y si acusa a ALBA de lavado de dinero o si atenta contra los intereses de los monopolios o las transnacionales, el país  entró en una nueva fase donde la población comienza a madurar  sobre los beneficios que este tipo de inversión le genera, lo manifiestan los pequeños productores que le venden sus cosechas a ALBA alimentos, que tienen mayor remuneración económica y las posibilidades de mayor inversión en la reactivación de la agricultura desaparecida en los 20 años de gobiernos de ARENA.
Todo este proceso encaminado desde el triunfo del FMLN en el 2009 y el triunfo obtenido en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 2014, presagiaban que obtendría un considerable número de diputados mayor que la derecha en las elecciones legislativas del 1 de marzo del 2015. Frente a este panorama surgen más preguntas que respuestas como las siguientes: que hace posible que la derecha obtenga mayor cantidad de curules, será que la campaña mediática de miedo infundado tuvo sus resultados, o la renovación de muchas de sus figuras que lograron arrastrar el voto de los jóvenes, será  que el FMLN sufre un desgaste político o que el pueblo salvadoreño no alcanza a dimensionar por su falta de cultura política entre el proyecto de la clase pobre y el de los grupos de poder económico, el frente tendrá que hacer una profunda evaluación que le permita desde el ejecutivo reorientar si es necesario el proyecto histórico revolucionario, ya  que en cada proceso electoral tocará enfrentar una derecha más hostil arropada por la derecha venezolana, participando de los procesos y al mismo tiempo deslegitimándolos. 



jueves, 9 de abril de 2015


EL SALVADOR: LA REVOLUCIÓN NO TÉRMINO EN 1992







Rudis Yilmar Flores Hernández
Sociólogo, Profesor de la Universidad de
El Salvador, San Miguel, C.A
Correo: ryflores.ues@gmail.com
A diferencia de muchos procesos revolucionarios en el mundo, la gran revolución rusa del  17 de octubre de 1917, la revolución China de 1949, Cuba en 1959, Vietnam 1975 con una derrota humillante del imperialismo, Nicaragua 1979, todas tuvieron como característica la toma del poder por la vía armada, lo que permitió generar cambios profundos en las estructuras de poder de todas estas sociedades e instalando el modelo socialista que en algunos países fracaso y en otros como la revolución cubana siguió siendo el referente para muchos movimientos revolucionarios en América Latina.
En El Salvador la década de los años 70s ve nacer los movimientos revolucionarios en El Salvador que conducirían los procesos de lucha armada y un amplio movimiento de masas conformados por campesinos, clase trabajadora, estudiantes, mujeres organizadas, que emprendieron la batalla contra la represión de las dictaduras militares y por la conquista de mejores condiciones laborales. 
La concentración de poder en pocas manos, la excesiva acumulación de riqueza por las 14 familias y la indiferencia a los problemas sociales de grandes masas de población se tradujeron en los detonantes de las inmensas formas de lucha de los campesinos, estudiantes, obreros, por la conquista de mejores condiciones de vida tanto en el  campo como en la ciudad.
En la década de los 80s la guerra de guerrillas se expandió por todas las ciudades, y la acompañaba  el  movimiento de masas con capacidad de librar las batallas en las fábricas, las calles, barrios y colonias permitiendo cualificar la lucha revolucionaria, alcanzando un equilibrio militar, que políticamente significo la existencia de un doble poder, convenciendo a los norteamericanos de la necesidad de negociar el conflicto ante la incapacidad de la Fuerza Armada de El Salvador de derrotar militarmente a un pequeño ejército guerrillero.
Después de los acuerdos de Paz en enero de 1992 firmados por los actores políticos en conflicto  (Gobierno de la república y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional) dieron   apertura al gran reto que debían asumir las fuerzas insurgentes como organización política. Fue el capítulo inédito de la historia salvadoreña convocar a elecciones abiertas para que ex guerrilleros participaran en la disputa electoral, con muchas trabas, limitantes y sin andamiaje institucional, sin embargo en 1994, un par de años después ingresaban a la contienda en el campo político para competir con el candidato más fuerte de derecha de la Alianza Republicana Nacionalista-ARENA- Armando Calderón Sol.
Un elemento importante  en el análisis de las últimas décadas del principal instrumento político de la oligarquía es que durante los cuatro periodos de gobiernos areneros desde 1989 hasta el 2009 se produjo una corrupción prolongada, un desgaste como instituto político a partir de la implementación de políticas económicas que lejos de  resolver los problemas más sentidos de la población  los agudizaron (neoliberalismo, privatización, dolarización, TLC). 
Claro está que durante  más de un siglo los oligarcas construyeron un poder político y económico de la estructura salvadoreña que les permitía consolidar su dominio,  ya sea a través de los  procesos de expropiación y de acumulación de cantidades de riqueza en detrimento de las condiciones de la clase trabajadora mediante la concentración del poder del Estado que obedecía a sus intereses bajo la complicidad de las dictaduras militares que hasta la finalización del conflicto armado con los acuerdos de paz en 1992 dejaron de ser los guardianes de los intereses del bloque oligárquico.
Ante la pérdida de considerables cuotas de poder político como el ejecutivo, desde el 2009, no tener mayoría simple en el congreso y sus contradicciones internas la estrategia de los tecnócratas contratados por ARENA sigue anclada en la guerra fría y su lucha ideológica se fundamenta en fomentar el miedo tomando como bandera de lucha el tema de las pandillas en El Salvador y planteando la desaparición de dicho fenómeno, olvidando que durante los 20 años de gobiernos de derecha este sufrió una mutación, convirtiéndose en el principal problema social que agobia a los salvadoreños  y que requiere una solución multisectorial, la crisis provocada por la derecha venezolana y  la política de agresión para América Latina, vendiendo la idea que estaríamos igual que en Venezuela si gana el FMLN.
Hoy en día las batallas se libran en los procesos electorales entre los dos proyectos, el liderado por la derecha que  nos ofrece regresar a las recetas neoliberales y al viejo sistema de preferencias de los grupos de poder económico perdidos desde el ascenso del FMLN al órgano ejecutivo desde el 2009 y el proyecto histórico de la izquierda que tiene a su base los objetivos preferenciales  por los pobres y que se evidencian en las políticas públicas orientadas sobre los programas sociales que benefician a los sectores más desprotegidos de la sociedad salvadoreña.
Frente a una derecha involucrada en el terrorismo internacional apoyando procesos de desestabilización y golpes de estado en países con gobiernos electos democráticamente y que no representan los intereses de las transnacionales, de los norteamericanos y de la clase oligárquica será importante diseñar nuevas estrategias de lucha política y organizativa, construyendo poder popular que permita defender lo conquistado.
La derecha participa de los procesos electorales; y al no tener el control como en el pasado del máximo organismo electoral deslegitima las instituciones, adopta nuevas formas de manifestarse, se moviliza aunque en pequeñas cantidades de gente simpatizantes de ARENA en las calles que históricamente son los campos de batalla de la clase trabajadora, buscan crear desestabilización.
En la guerra los espacios conquistados se defendían a sangre y fuego y siempre seguían siendo territorios liberados; por ahora cada espacio político conquistado hay que defenderlo, los campos de batalla están en cada una de las instituciones donde se encuentre un militante del FMLN  y desde esa trinchera hay que defender el proyecto histórico para la construcción de una sociedad con mejores condiciones de vida para los más desposeídos, la revolución no termino en 1992, ahora enfrentamos a una derecha que también esta una lucha permanente por regresar al poder del ejecutivo y reconquistar lo perdido.


sábado, 14 de febrero de 2015

El Salvador: La Posguerra y el  XXIII aniversario de los Acuerdos de Paz
Rudis Yilmar Flores[1]
Correo electrónico: ryflores.ues@gmail.com

El debate de la transición de posguerra en El Salvador continua abierto, veintitrés  años de iniciado este proceso. Uno de los aspectos cruciales de la discusión es la dimensión democrática de esta transición, en todo caso se pensó que si se daba esta transición, esta debía ser necesariamente democrática, pero la realidad demostró que no se trataba de algo mecánico que nos conduciría a un régimen de estas dimensiones.
Un elemento clave en la discusión y en el discurso sigue siendo que los acuerdos de paz pusieron fin al conflicto armado que generaron cambios en las viejas estructuras del Estado y se crearon nuevas instituciones. Ejemplo de ello fue la desaparición de los cuerpos represivos de seguridad como la Guardia Nacional, Policía de Hacienda, Policía Nacional, los batallones de reacción inmediata, la reducción del ejército, la creación de una nueva doctrina militar y surgieron la Nueva Policía Nacional Civil, El Consejo Nacional de la Judicatura, el Tribunal Supremo Electoral, el Foro Económico Social que en los sucesivos gobiernos de derecha lo desaparecieron y un elemento importante fue la conversión del ejército guerrillero en una institución política que ganó las elecciones presidenciales en marzo del 2009.
Si estos cambios son importantes, no fueron suficientes para rebasar las causas que generaron el conflicto armado que género más de 70 mil muertos y 100 mil desaparecidos, el tema económico social sigue siendo el indicador que mide el nivel de democratización que vive el país y la falta de concertación en grandes temas como la reducción de la pobreza.
Hay  un elemento que adquiere gran trascendencia y que el  proceso de transición democrática no ha logrado resolver es el problema de la exclusión social, la mala distribución de la riqueza, la falta de empleo, de una vivienda digna, educación y que en los últimos años ha provocado un auge mayor  de la violencia en sus distintas manifestaciones en el seno de un orden social que le da la espalda a la gran mayoría  de la población en sus propios intereses.
En cierto modo, El Salvador en los últimos tiempos debió perder la brújula en el tema del cumplimiento de los  acuerdos de paz, ya que estos fueron suscritos como un requisito imprescindible para avanzar en los nuevos propósitos de la democratización social y política del país, pero a estas alturas existe un déficit en su cumplimiento según lo pactado en Chapultepec y Nueva York.
La realidad de los salvadoreños se volvió muy compleja ya que las necesidades más sentidas de la población no se logran resolver, esto necesariamente conduce a los sectores populares a una lucha permanente por la reivindicación de sus derechos y la respuesta de manera inmediata de los últimos gobiernos de derecha ha sido la criminalización de los movimientos sociales a partir de la creación de nuevas leyes como la ley antiterrorista y los planes mano dura y súper mano dura y el surgimiento de los juzgados especializados o “blindados” como las nuevas formas de represión del estado.
La presencia del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas el pasado 16 de enero fecha en que se cumplió el veintitrés aniversario de los Acuerdos de Paz expresa claramente que el país sigue enfrentando  los grandes problemas estructurales que generaron el conflicto armado, en su discurso expresó los enormes desafíos en los temas de inseguridad ciudadana, la exclusión social y la falta de oportunidades que impiden que muchos salvadoreños cosechen los beneficios que trae la paz. Es necesario el fortalecimiento de las instituciones incluyentes y la creación de mecanismos que acerquen las voces de los grupos vulnerables a la toma de decisiones incluyendo  a los más desposeídos, a los pueblos indígenas, mujeres y hombres, es necesario seguir afrontando los viejos desafíos, como equilibrar las tensiones entre la paz y la justicia, entre los intereses de los que tienen poder y los de la población en general, entre las urgencias cortoplacistas y la sostenibilidad a largo plazo.
Por su parte el presidente Salvador Sánchez Cerén considera necesario la profundización de la cultura democrática de los mecanismos de transparencia de las instituciones y el permanente combate contra la corrupción ampliando los mecanismos de participación ciudadana  con la inclusión de los pueblos originarios y más  de tres millones de compatriotas que viven en el exterior. Reconoce los grandes problemas de la violencia e inseguridad y la cantidad de homicidios de hombres mujeres y niños que a diario se cometen y los retos para alcanzar la paz y la tranquilidad que desean las familias. El conflicto que hoy nos desafía es la criminalidad  generada por el narcotráfico, su conexión con las pandillas y la extorción.
La tarea de la construcción de la democracia es una tarea pendiente de los acuerdos de paz y retoma mayor auge con el gane electoral de la izquierda  el 15 de marzo de 2009, y en 2014 representada por el F.M.L.N, por considerarse como el triunfo del pueblo y donde el estado de privilegios de que gozaba la derecha tienden a desaparecer y el nuevo gobierno debe seguir contemplando en la agenda el trato preferencial por los pobres.
No cabe duda, existe una deuda histórica con el pueblo salvadoreño y su democracia, ahora se le presentan nuevos escenarios y nuevas formas de lucha ante la nueva realidad que vive el país y el mundo, aun cuando la izquierda gobierne es necesario romper los viejos esquemas de dominación y de explotación de la clase empresarial   que hoy en día siguen vigentes y que se niegan a aceptar que el mundo cambio.






[1] Profesor Investigador de la Universidad de El Salvador, Facultad Multidisciplinaria Orienta (San Miguel) Miembro del Comité Directivo de la Asociación Latinoamericana de Sociología, Secretario de la Directiva de la Asociación Centroamericana de Sociología , Miembro de la Asociación  Salvadoreña de Sociología.

viernes, 2 de enero de 2015

EL SALVADOR: PETROCARIBE, UNA MIRADA A LA INTEGRACIÓN LATINOAMERICANA
Rudis Yilmar Flores Hernández
Sociólogo, Profesor de la Universidad de
El Salvador, San Miguel, C.A
 
Después del triunfo del FMLN en las elecciones presidenciales del 2009 en materia económica y de inversión  el país experimento  un giro estratégico, se abrieron nuevos horizontes en materia de  relaciones comerciales que incomodan constantemente los intereses de la derecha empresarial.
El surgimiento del ALBA como contraposición al fallido esfuerzo de los gringos de crear un  Área de Libre Comercio para las Américas, genera expectativas para la mayoría de los países latinoamericanos en una nueva era de relaciones comerciales, de respeto mutuo entre los pueblos y en materia de cooperación  económica y social.
A pesar que El Salvador no es miembro permanente de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América  (ALBA)  y por la importancia de las relaciones sostenidas  entre el recordado presidente Chávez  y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN),  dieron  como resultado programas como la Misión  Milagro que ha contribuido a que más de  seis mil salvadoreños  fueran operados de problemas de la vista de manera gratuita en la República Bolivariana, el recibimiento de ayuda en caso de desastres naturales y el convenio de exportación de  crudo a través de ALBAPETROLEOS con precios preferenciales. Alba Petróleos de El Salvador  es la síntesis del nuevo concepto de cooperación entre los pueblos, enmarcada en El ALBA y PETROCARIBE. En él concurren la visión de futuro del Estado venezolano en Concreción de los sueños de Bolívar y Martí por la integración y la Unidad de América Latina.
A partir de  febrero de 2012 se impulsa Alba Alimentos de El Salvador que es un proyecto  con el objetivo de beneficiar a los agricultores, a través de financiamiento, insumos y comercialización. La empresa tiene el objetivo de reactivar 100 mil manzanas de tierra a escala nacional.
Alba Alimentos se convierte en  ayuda a los campesinos salvadoreños, y con una  proyección de  reactivar la agricultura, la cual fue lacerada y esterilizada por el partido ARENA. El programa de Alba Alimentos consiste en la entrega de semilla, agroquímicos, entre los que podemos mencionar  el sulfato un agroquímico tan vital para el cultivo del maíz y del frijol. Este programa es canalizado a través del FMLN con la ayuda del Gobierno Bolivariano de Venezuela. Con este proyecto se está logrando que  el campesino pueda sembrar la tierra y elevar los niveles de productividad.
La cooperación de países como Venezuela permite el desarrollo e intercambio entre  los pueblos de nuestra América, y la alternativa de consolidar un modelo alternativo de desarrollo que tenga como base al ser humano y la preservación de los recursos naturales para las sostenibilidad de las futuras generaciones.
Durante el 2013, un año preelectoral de cara a las elecciones presidenciales  del 2014 la Asociación de la Empresa Privada y su instrumento político ARENA  desataron una campaña contra ALBA negocios, acusándola de competencia desleal por los precios preferenciales que tiene por ejemplo los frijoles y el maíz para los pobres, contradiciéndose con las reglas del libre mercado que ellos mismos impusieron con el modelo neoliberal.
Ahora no se trata de si  le gusta o no a la empresa y si acusa a ALBA de lavado de dinero o si atenta contra los intereses de los monopolios o las transnacionales, el país  entró en una nueva fase donde la población comienza a madurar  sobre los beneficios que este tipo de inversión le genera, lo manifiestan los pequeños productores que le venden sus cosechas a ALBA alimentos, que tienen mayor remuneración económica y las posibilidades de mayor inversión en la reactivación de la agricultura desaparecida en los 20 años de gobiernos de ARENA.
El pasado 1 de junio de 2014 asumió la presidencia del país, Salvador Sánchez Cerén, elegido para  el periodo 2014-2019 y como primera medida solicito formalmente el ingreso de El Salvador a Petro Caribe, sistema promovido por el presidente  Nicolás Maduro.
La adhesión a Petro Caribe representa una nueva visión estratégica en la redirección de las relaciones del país con el sur, se busca la erradicación del hambre y la pobreza así como la cooperación multilateral en la óptica unionista y los principios de solidaridad y cooperación, con un acceso confiable a las fuentes de energía.

Para El Salvador representa el abastecimiento de recursos energéticos mediante una vía equitativa y justa, lo cual conlleva a un ahorro en la factura petrolera con facilidades de pago permitiendo destinar recursos para el financiamiento de los programas sociales, inversión en el desarrollo económico y social, fomento del empleo, educación, deporte entre otros y fomentara las exportaciones de los pequeños productores. Entre otras cosas también se plantea la construcción de una fábrica de arroz, la construcción y puesta en funcionamiento de una planta de producción de celdas solares y lámparas LED, con esto se busca convertir a al país en proveedor de lo que produzca y posicionándolo como un país productor en América latina.